Les daría 5 estrellas por las pupusas solamente, porque son muy sabrosas... Pero lamentablemente fallan en la atención al cliente y en los tiempos de espera de sus comensales. La actitud de la mesera deja mucho que desear y la última vez tardaron más de media hora en traernos la comida. Es un lugar modesto, donde puedes llevar a alguien para que pruebe la comida Salvadoreña, eso sí, no vayas con tanta hambre para que la espera no te incomode.